Nunca antes hubo semejante movimiento de personas y mercancías por todo el mundo. A pesar de los recursos limitados, los gobiernos deben mantenerse en estado de alerta ante el aumento de los riesgos. A esto se suma el hecho de que muchas economías de todo el mundo han sufrido recesiones en los últimos años, por lo que los gobiernos cuentan con menos dinero para gastar en fuerzas del orden, aduana y seguridad en la frontera.
Los procedimientos ya existentes pueden mejorarse para utilizar de la mejor manera los recursos en la frontera. Sin embargo, lo que los gobiernos necesitan en última instancia es encontrar métodos nuevos y más inteligentes para hacer con menos, sin poner en riesgo la seguridad. Una forma de lograrlo es brindar al personal de atención al cliente las herramientas y tecnologías más avanzadas para que puedan tener información precisa en el momento indicado a fin de tomar las decisiones correctas.