El combustible representa el gasto operativo más grande para las líneas aéreas. IATA estima que los gastos en combustible para la industria de las aerolíneas ascenderán a 192.000 millones de dólares en el año 2015, lo que representa el 26,1 % de los gastos operativos. Recortar el consumo de combustible puede causar un gran impacto en el panorama general de una línea aérea. Por eso, contar con la distribución correcta de peso y carga en la aeronave y desarrollar un plan de vuelo óptimo para minimizar el consumo de combustible son prioridades máximas.